La reducción de estómago sin incisiones, POSE, se realiza enteramente por vía oral mediante una simple endoscopia y consiste en realizar una serie de pliegues en el fundus gástrico para modificar el tamaño del estómago y reducir su capacidad, así como en el antro para enlentecer su vaciado.
Como no hay incisiones ni heridas externas, el proceso de recuperación tras el POSE es muy rápido y poco molesto. De hecho, un paciente puede operarse un viernes y reincorporarse a su rutina habitual el lunes.
Con el POSE se puede esperar un adelgazamiento del 45% -55% del exceso de peso.
Para alcanzar unos resultados óptimos, la reducción de estómago sin incisiones debe ir siempre acompañada de un programa de reeducación de hábitos alimenticios y de estilo de vida. El éxito del tratamiento dependerá en gran medida de tu nivel de adhesión al seguimiento nutricional y psicológico.